La Jornada, la capital / 29 de junio 2007
Laura Gómez Flores
El secretario de Obras y Servicios, Jorge Arganis Díaz Leal, rechazó que exista riesgo de una inundación de graves proporciones en la ciudad de México, ante el incremento de las precipitaciones pluviales y la pérdida de capacidad de desalojo del drenaje profundo, pues desde la administración pasada se realizan obras emergentes con las autoridades federales para aminorar esta posibilidad.
"No hay que alarmar a la población innecesariamente, como lo hizo el director de la Comisión Nacional del Agua (José Luis Luege Tamargo), quien aun cuando es ingeniero, es químico y no está del todo empapado de la formación y antecedentes del caso. Iguamente no considera que todas las acciones en ese sentido se han aprobado de manera tripartita con el estado de México", argumentó.
Para este año, agregó, se tiene un presupuesto de 2 mil 434 millones de pesos, de los cuales 80 por ciento son recursos locales provenientes del Fideicomiso 1928 y del Fondo Metropolitano. Mil 654 millones se destinarán a obra nueva, como es el entubamiento del gran canal; el interceptor oriente; 16 plantas de bombeo, entre las cuales se encuentran Gran Canal, Vaso de Cristo, Casa Colorada, Canal de Sales y Santa Catarina I y II; y siete colectores en Santa Martha, Zaragoza, Ejército de Oriente y El Rosario, entre otras.
A mantenimiento se canalizarán 583 millones para equipos electromecánicos y desazolve, donde se llevan 700 mil metros cúbicos, 40 por ciento más que en el mismo periodo del año pasado; y a la rehabilitación del alcantarillado en el Centro Histórico y la planta de tratamiento del Cerro de la Estrella se destinarán 197 millones, precisó.
El funcionario lamentó en entrevista que el director de la Conagua "sufra de amnesia, pese a estar tan joven y alarme a la población sobre riesgos que son posibles, pero que estamos atajándolos con obras nuevas y de mantenimiento", pues el cambio climático ha derivado en un incremento de 10 por ciento en la precipitación pluvial, llegando en mayo a un nivel histórico de 50.1 metros cúbicos por segundo.
Los encharcamientos e inundaciones en algunas partes de la ciudad son latentes, debido a que una parte de los 230 kilómetros de la red de drenaje profundo tiene 50 o 100 años y el emisor central 40 en operación, perdiendo su capacidad de desalojo. Pero la puesta en marcha de las cuatro plantas de bombeo en enero próximo, como son la de Gran Canal, Casa Colorada, Canal de Sales y Vaso de Cristo, con una inversión de 325 millones de pesos, revertirán dicha situación.
Hasta el momento se cuenta con una capacidad de desalojo de aguas negras de 150 metros cúbicos por segundo y estas plantas lo incrementarán a 200, luego de "batallar" con la burocracia de la Secretaría de la Función Pública y Banobras para la entrega de recursos para su construcción, dijo al destacar que desde 1987 se inspecciona la red para conocer la situación en que se encuentra y "atender de inmediato los problemas".
En 1992 se realizó otra verificación y en la época de estiaje de 2005-2006 se hizo incluso un video, ante la presunción de la presencia de vehículos y diversos obstáculos en la red, lo cual resultó una mentira, pero determinó la urgencia de trabajar en su mantenimiento correctivo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario