Excelsior, dinero / 31 de julio 2007
José Yuste
El agua ha enfrentado al gobierno federal con la capital mexicana, pero también podría hacerlo con el Estado de México, hoy gobernado por Enrique Peña Nieto.
Conagua, a cargo de José Luis Luege, le solicitó al Estado de México que pague el mantenimiento correspondiente del sistema Cutzamala, a lo cual el gobierno de Toluca respondió que lo deben hacer los municipios, no la entidad federativa.
Allí explotó la bomba.
Total, el Estado de México debe al gobierno federal 12 mil 300 millones de pesos por los aprovechamientos del agua del sistema Cutzamala, los cuales, si se les quita la multa y recargos, quedarían en un adeudo de nueve mil millones de pesos.
La situación es tan problemática que, incluso, el gobierno de Peña Nieto mantiene una demanda de su antecesor en contra del gobierno del DF y la Federación, por un supuesto daño ecológico en el río Lerma.
No existe otra alternativa: los gobiernos estatales y federal deben vérselas para sostener un área metropolitana enorme como la Ciudad de México.
Estamos viendo problemas entre Felipe Calderón y Marcelo Ebrard por un refinanciamiento de la deuda del DF, para pasarla de ocho a 30 años de vencimientos con ahorros. Dicho tema ya se politizó.
Con el DF también se politizó el del drenaje profundo, donde deben existir inversiones conjuntas entre la capital y la Federación para echar a andar un nuevo emisor, el oriente, y de esta forma ayudar a llevar las aguas negras de la ciudad.
Y ahora vemos que no sólo es el DF. También es el Estado de México, con el cual se tienen problemas sobre temas financieros, en este caso también por el agua, pero por el sistema Cutzamala. La deuda allí está y el gobierno de Calderón necesita cobrarla. Son, remarco, 12 mil 300 millones de pesos que el Estado de México le debe a Conagua por aprovechamientos, donde si se perdonan las multas serán nueve mil millones de pesos. ¿Otra guerra financiera-política por venir?
José Yuste
El agua ha enfrentado al gobierno federal con la capital mexicana, pero también podría hacerlo con el Estado de México, hoy gobernado por Enrique Peña Nieto.
Conagua, a cargo de José Luis Luege, le solicitó al Estado de México que pague el mantenimiento correspondiente del sistema Cutzamala, a lo cual el gobierno de Toluca respondió que lo deben hacer los municipios, no la entidad federativa.
Allí explotó la bomba.
Total, el Estado de México debe al gobierno federal 12 mil 300 millones de pesos por los aprovechamientos del agua del sistema Cutzamala, los cuales, si se les quita la multa y recargos, quedarían en un adeudo de nueve mil millones de pesos.
La situación es tan problemática que, incluso, el gobierno de Peña Nieto mantiene una demanda de su antecesor en contra del gobierno del DF y la Federación, por un supuesto daño ecológico en el río Lerma.
No existe otra alternativa: los gobiernos estatales y federal deben vérselas para sostener un área metropolitana enorme como la Ciudad de México.
Estamos viendo problemas entre Felipe Calderón y Marcelo Ebrard por un refinanciamiento de la deuda del DF, para pasarla de ocho a 30 años de vencimientos con ahorros. Dicho tema ya se politizó.
Con el DF también se politizó el del drenaje profundo, donde deben existir inversiones conjuntas entre la capital y la Federación para echar a andar un nuevo emisor, el oriente, y de esta forma ayudar a llevar las aguas negras de la ciudad.
Y ahora vemos que no sólo es el DF. También es el Estado de México, con el cual se tienen problemas sobre temas financieros, en este caso también por el agua, pero por el sistema Cutzamala. La deuda allí está y el gobierno de Calderón necesita cobrarla. Son, remarco, 12 mil 300 millones de pesos que el Estado de México le debe a Conagua por aprovechamientos, donde si se perdonan las multas serán nueve mil millones de pesos. ¿Otra guerra financiera-política por venir?
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