A pesar que la Dirección local de Puebla de la Comisión Nacional del Agua (CNA) tiene un proyecto que podría terminar definitivamente con la invasión de zonas federales en ríos y barrancas en todo el estado, a la fecha la dependencia se ha negado a dar mayores detalles sobre el mismo
La Jornada de Oriente
2007-09-12 10:00 am
A pesar que la Dirección local de Puebla de la Comisión Nacional del Agua (CNA) tiene un proyecto que podría terminar definitivamente con la invasión de zonas federales en ríos y barrancas en todo el estado, a la fecha la dependencia se ha negado a dar mayores detalles sobre el mismo.
La propuesta de la CNA consiste en que los ayuntamientos, particularmente el de la capital del estado, modifiquen sus leyes de administración urbana y sea obligatorio construir calles a un costado de ríos y barrancas, de tal manera que se resguarde la zona federal, que es de 10 metros tierra adentro a partir del punto máximo que alcanza el agua en temporada de lluvias, así como las zonas de riesgo, que son los siguientes 25 metros después de la zona federal.
Esta medida ya se aplicó con éxito en el estado de Tlaxcala desde hace varias décadas, y en Puebla podría ser la solución a la invasión por parte de particulares que suelen ocupar esas zonas para ampliar sus propiedades, tirar material de escombro, así como desechos y basura.
Sin embargo, a pesar de que desde hace un mes se ha solicitado una entrevista con los especialistas de la CNA para abundar sobre la medida, la oficina de prensa de la Dirección local en Puebla se ha negado a concederla: la encargada de esa área, Maricarmen Gómez, no ha podido resolver esa petición, pues los funcionarios de la dependencia federal se niegan a dar entrevistas si no lo autoriza Gómez.
Ayer, este medio se presentó en la CNA para conocer las acciones que tomarán las autoridades federales contra el vecino de la colonia Santa Cruz Guadalupe, que rellenó con escombros una parte del río Zapatero, formando una curva de 90 grados en el cauce del cuerpo de agua, lo que ocasionó que el río se desbordara la noche del domingo tras la intensa lluvia de ese día, dejando a 60 familias damnificadas. La oficina de prensa de la Comisión Nacional del Agua estuvo cerrada toda la mañana y nadie fue capaz de responder si la encargada de prensa se presentaría a trabajar.
La Jornada de Oriente
2007-09-12 10:00 am
A pesar que la Dirección local de Puebla de la Comisión Nacional del Agua (CNA) tiene un proyecto que podría terminar definitivamente con la invasión de zonas federales en ríos y barrancas en todo el estado, a la fecha la dependencia se ha negado a dar mayores detalles sobre el mismo.
La propuesta de la CNA consiste en que los ayuntamientos, particularmente el de la capital del estado, modifiquen sus leyes de administración urbana y sea obligatorio construir calles a un costado de ríos y barrancas, de tal manera que se resguarde la zona federal, que es de 10 metros tierra adentro a partir del punto máximo que alcanza el agua en temporada de lluvias, así como las zonas de riesgo, que son los siguientes 25 metros después de la zona federal.
Esta medida ya se aplicó con éxito en el estado de Tlaxcala desde hace varias décadas, y en Puebla podría ser la solución a la invasión por parte de particulares que suelen ocupar esas zonas para ampliar sus propiedades, tirar material de escombro, así como desechos y basura.
Sin embargo, a pesar de que desde hace un mes se ha solicitado una entrevista con los especialistas de la CNA para abundar sobre la medida, la oficina de prensa de la Dirección local en Puebla se ha negado a concederla: la encargada de esa área, Maricarmen Gómez, no ha podido resolver esa petición, pues los funcionarios de la dependencia federal se niegan a dar entrevistas si no lo autoriza Gómez.
Ayer, este medio se presentó en la CNA para conocer las acciones que tomarán las autoridades federales contra el vecino de la colonia Santa Cruz Guadalupe, que rellenó con escombros una parte del río Zapatero, formando una curva de 90 grados en el cauce del cuerpo de agua, lo que ocasionó que el río se desbordara la noche del domingo tras la intensa lluvia de ese día, dejando a 60 familias damnificadas. La oficina de prensa de la Comisión Nacional del Agua estuvo cerrada toda la mañana y nadie fue capaz de responder si la encargada de prensa se presentaría a trabajar.
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