Hay personas que beben líquidos de más, pues combinan agua pura y bebidas rehidratantes, lo cual -en ciertos casos- provoca desnutrición y hasta problemas renales
Excesos que dañanExcesos que dañan
Silvia Ojanguren
El Universal
Lunes 14 de mayo de 2007
Una gota de agua es capaz de perforar una roca con el paso del tiempo, lo que demuestra su poder. Por eso, expertos en salud recomiendan tomarla con moderación y no dejar pasar por alto que lo ideal es consumir de dos litros y medio a tres, dependiendo de la actividad física y la amenaza de deshidratación debido a las altas temperaturas.
Hay personas que beben líquidos de más, pues combinan agua pura y bebidas rehidratantes, lo cual -en ciertos casos- provoca desnutrición y hasta problemas renales.
Especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social han lanzado un llamado de alerta sobre el consumo de productos preparados con químicos y sustancias hidratantes, que sólo deben beberse si se practica algún deporte.
La nutrióloga Érika Rojas Rodríguez dice que hay tres cosas que nadie debe olvidar sobre el agua:
* Lo recomendable es tomar 300 mililitros, poco más de un vaso, cada hora.
* No beber dos o tres litros en una sola ocasión.
* Hacer una sola toma no permite aprovechar sus cualidades.
Sugiere que, en caso de duda, se acuda al médico o nutriólogo para que establezca la cantidad de agua que se puede tomar y que debe estar en relación con el peso.
Señala que quien pesa 70 kilos debe ingerir de dos litros a dos litros con 100 mililitros. Pero si practica algún deporte, la cantidad debe aumentar en la medida en la que transpire, y puede llegar a necesitar hasta tres o más litros. Los niños necesitan en promedio 35 mililitros por kilogramo de peso.
Según Rojas, hay que tener atención sobre lo malo y lo bueno del agua:
1) Tomar más agua de la que el cuerpo requiere produce pérdida de sodio, potasio y magnesio, sales que son barridas por la orina. El cuerpo no tiene capacidad para guardar mucha agua, al contrario de lo que sucede con las grasas, proteínas y carbohidratos, que se almacenan y originan sobrepeso u obesidad.
2) La pérdida de potasio y magnesio causa problemas de presión arterial baja, situación frecuente entre adolescentes y jóvenes, especialmente mujeres, entre las que la moda impone llevar en todo momento una botella de agua. Muchas jovencitas beben el agua para sustituir alimentos, lo cual puede llevar a anorexia-bulimia o una severa desnutrición.
3) Es bueno consumir agua, pero no en exceso ni utilizarla como sustituto de algún alimento. En algunos casos sí se recomienda ingerir tres litros de agua, como son las personas que tienen que tomar cierto tipo de medicamentos, que sufren importantes quemaduras, deshidratación o que tienen problemas metabólicos.
La nutrióloga apunta que las bebidas rehidratantes sólo deben consumirlas quienes tienen sudor extremo y nunca como "agua de tiempo", que es otra moda entre los adolescentes, quienes sin requerirlo abusan de estos líquidos. Esto les pude causar una sobrecarga de la función renal. Algo similar causan los refrescos, que suelen detonar la obesidad.
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