El problema hace que disminuya el nivel de los cuerpos de agua superficial en la frontera entre México y Estados Unidos
Reforma
2007-07-16 8:38 am
El agua subterránea es estratégica para el País, pues tiene un potencial mayor que la superficial; pero este recurso ha tenido un manejo inadecuado, advirtió Gabriela Ángeles Serrano, del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN) de la UNAM.
En un comunicado de esa casa de estudios, la investigadora informó que en la actualidad, México tiene delimitados y reconocidos 653 acuíferos, pero 104 de ellos presentan un estado crítico debido a un mal manejo de la extracción.
Esto causa, por ejemplo, que disminuya el nivel de los cuerpos de agua superficial en la frontera entre México y Estados Unidos.
A pesar de sus posibilidades, señaló, su mal empleo comienza a tener fuertes repercusiones en la frontera entre Estados Unidos y la nación mexicana, donde se ha disminuido el nivel de cuerpos superficiales y escurrimientos como el río Bravo, lo que impacta directamente los humedales, que son ecosistemas asociados con las descargas subterráneas.
En todos los estados fronterizos se han visto alteraciones y también en el lado estadounidense. Recordó que los veneros subterráneos representan más del 90 por ciento del líquido dulce disponible en el planeta.
En la actualidad, Estados Unidos hace todo lo posible para proteger sus volúmenes, incluso a costa del potencial mexicano, pero como no se tiene un tratado en la materia, no hay forma de evitarlo. Por ello, la experta consideró necesario un acuerdo conjunto al respecto en el marco de una agenda de cooperación para la protección de los acuíferos transfronterizos en el mundo.
Subrayó que el revestimiento de cemento que en el país vecino se realiza al canal Todo Americano cancelará las filtraciones hacia nuestro territorio y además de los costos económicos y sociales, dañará la recuperación del acuífero compartido entre ambas naciones.
Añadió que a mediano plazo, los agricultores del lado mexicano tendrán gran dificultad para obtener líquido en sus pozos en calidad y cantidad aceptable. De seguir la tendencia se perderán las descargas naturales en la ribera del Mar de Cortés y con ello la biota asociada a la zona.
Serrano lamentó que hasta el momento los tratados internacionales de México no regulen los veneros subterráneos, sino sólo los superficiales. Además, tanto al norte como al sur se tiene poco conocimiento sobre los acuíferos y cómo se comparten. No se sabe quién tiene más agua ni quién la ocupa más.
Reforma
2007-07-16 8:38 am
El agua subterránea es estratégica para el País, pues tiene un potencial mayor que la superficial; pero este recurso ha tenido un manejo inadecuado, advirtió Gabriela Ángeles Serrano, del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN) de la UNAM.
En un comunicado de esa casa de estudios, la investigadora informó que en la actualidad, México tiene delimitados y reconocidos 653 acuíferos, pero 104 de ellos presentan un estado crítico debido a un mal manejo de la extracción.
Esto causa, por ejemplo, que disminuya el nivel de los cuerpos de agua superficial en la frontera entre México y Estados Unidos.
A pesar de sus posibilidades, señaló, su mal empleo comienza a tener fuertes repercusiones en la frontera entre Estados Unidos y la nación mexicana, donde se ha disminuido el nivel de cuerpos superficiales y escurrimientos como el río Bravo, lo que impacta directamente los humedales, que son ecosistemas asociados con las descargas subterráneas.
En todos los estados fronterizos se han visto alteraciones y también en el lado estadounidense. Recordó que los veneros subterráneos representan más del 90 por ciento del líquido dulce disponible en el planeta.
En la actualidad, Estados Unidos hace todo lo posible para proteger sus volúmenes, incluso a costa del potencial mexicano, pero como no se tiene un tratado en la materia, no hay forma de evitarlo. Por ello, la experta consideró necesario un acuerdo conjunto al respecto en el marco de una agenda de cooperación para la protección de los acuíferos transfronterizos en el mundo.
Subrayó que el revestimiento de cemento que en el país vecino se realiza al canal Todo Americano cancelará las filtraciones hacia nuestro territorio y además de los costos económicos y sociales, dañará la recuperación del acuífero compartido entre ambas naciones.
Añadió que a mediano plazo, los agricultores del lado mexicano tendrán gran dificultad para obtener líquido en sus pozos en calidad y cantidad aceptable. De seguir la tendencia se perderán las descargas naturales en la ribera del Mar de Cortés y con ello la biota asociada a la zona.
Serrano lamentó que hasta el momento los tratados internacionales de México no regulen los veneros subterráneos, sino sólo los superficiales. Además, tanto al norte como al sur se tiene poco conocimiento sobre los acuíferos y cómo se comparten. No se sabe quién tiene más agua ni quién la ocupa más.
Powered by ScribeFire.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario