El Imparcial, Periódico de Hoy
23 de Julio del 2007
General - Pág.26
Pekín, China.- Las inundaciones y tormentas que azotan en la última semana diversas regiones de la geografía china han causado la muerte de al menos 170 personas y cerca de 10 millones de afectados, según las informaciones que publicó ayer la agencia estatal Xinhua.
Las últimas 30 víctimas mortales fueron halladas por los equipos de salvamento en la provincia sureña de Yunnan, donde las lluvias causaron varios corrimientos de tierras en zonas rurales tales como Xinqi, Dehong o Puer (localidad esta última que ya resultó afectada este año por un terremoto).
En total, 59 personas han fallecido y ocho siguen desaparecidas en esa provincia, donde 386 mil personas se han visto afectadas por la pérdida de viviendas, ganado y cultivos.
Los corrimientos de tierra en esa región, fronteriza con Birmania, también han causado el corte de carreteras entre China y ese país surasiático.
A las víctimas de Yunnan se suman las conocidas en días anteriores en las divisiones administrativas chinas de Chongqing, en el Centro (42 fallecidos), Shandong, Este (40), Sichuan, Suroeste (15) y Xinjiang, Noroeste (16).
Casi 7 millones de personas se han visto afectadas en esas zonas por las tormentas e inundaciones, que de forma poco usual han afectado también gravemente a algunas ciudades, como Jinan (capital de Shandong), donde fallecieron al menos 12 personas.
Entretanto, las autoridades han advertido que el Río Huaihe, el tercero más largo del país (entre el Yangtsé y el Amarillo) corre peligro de desbordarse en alguno de sus tramos.
Las fuentes oficiales aseguraron que los diques que controlan los cauces del río (que a lo largo de la historia ha causado muchas graves inundaciones) podrían romperse, tras 19 días de altos niveles de agua y previsiones de que la situación podría prolongarse por lo menos 10 jornadas más.
23 de Julio del 2007
General - Pág.26
Pekín, China.- Las inundaciones y tormentas que azotan en la última semana diversas regiones de la geografía china han causado la muerte de al menos 170 personas y cerca de 10 millones de afectados, según las informaciones que publicó ayer la agencia estatal Xinhua.
Las últimas 30 víctimas mortales fueron halladas por los equipos de salvamento en la provincia sureña de Yunnan, donde las lluvias causaron varios corrimientos de tierras en zonas rurales tales como Xinqi, Dehong o Puer (localidad esta última que ya resultó afectada este año por un terremoto).
En total, 59 personas han fallecido y ocho siguen desaparecidas en esa provincia, donde 386 mil personas se han visto afectadas por la pérdida de viviendas, ganado y cultivos.
Los corrimientos de tierra en esa región, fronteriza con Birmania, también han causado el corte de carreteras entre China y ese país surasiático.
A las víctimas de Yunnan se suman las conocidas en días anteriores en las divisiones administrativas chinas de Chongqing, en el Centro (42 fallecidos), Shandong, Este (40), Sichuan, Suroeste (15) y Xinjiang, Noroeste (16).
Casi 7 millones de personas se han visto afectadas en esas zonas por las tormentas e inundaciones, que de forma poco usual han afectado también gravemente a algunas ciudades, como Jinan (capital de Shandong), donde fallecieron al menos 12 personas.
Entretanto, las autoridades han advertido que el Río Huaihe, el tercero más largo del país (entre el Yangtsé y el Amarillo) corre peligro de desbordarse en alguno de sus tramos.
Las fuentes oficiales aseguraron que los diques que controlan los cauces del río (que a lo largo de la historia ha causado muchas graves inundaciones) podrían romperse, tras 19 días de altos niveles de agua y previsiones de que la situación podría prolongarse por lo menos 10 jornadas más.
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