Por Fidel Castro, El Imparcial, 25 de abril, 2007
fcastro@elimparcial.com
Los vecinos de la calle Tamaulipas, casi esquina con Hidalgo, piden a las autoridades una solución definitiva a la fuga de aguas negras en ese sector.
“Ahora hasta un perro muerto tiraron y el mal olor de por sí era insoportable por las aguas negras”, expuso Virginia Cervantes Rodríguez.
La molestia para la vecina de la calle Tamaulipas, casi esquina con Hidalgo, es la poca calidad de vida para ellos y más sentida para su esposo Mario Valenzuela Macé, quien tiene una traqueotomía, un orificio en la garganta.
“El problema tiene aproximadamente alrededor de ocho años, la abandonan y cuando la atienden nada más la arreglan un ratito y vuelve a rebrotar la fuga y los malos olores”, reveló.
Con llamadas constantes al Organismo Operador Municipal de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Cajeme (Oomapasc), la promesa aún no se cumple de arreglar el problema.
“Ojalá que lo arreglen en forma definitiva, no sé qué tengan qué hacer, ya les compete a ellos, pero ya tiene mucho tiempo y es una molestia diaria”, aseguró.
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