En la ciudad de México se preparan reformas legales para que en el corto plazo se vuelva una obligación de las empresas vender a la ciudadanía muebles de baño con bajo consumo de agua; que en las zonas residenciales se utilice agua tratada para el riego, y que empresas de limpieza y lavado de autos utilicen exclusivamente agua de reúso.
Con esas reformas se plantea, además, la imposición de sanciones, como corte al abasto de agua a quienes no paguen por el líquido que utilizan. En esos casos, el suministro se otorgaría a través de hidrantes colocados en la vía pública o con agua embotellada que se entregaría de manera gratuita.
Ramón Aguirre, director del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, dio a conocer ayer que se mantienen pláticas con diputados de la ALDF, con el fin de impulsar modificaciones a las leyes de agua y salud.
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