En un problema de salud pública se ha convertido el río Agua Dulce, al ser considerada como un “Foco de Infección” debido que este afluente recibe alrededor de 100 litros de aguas negras por minuto, que provienen de los drenajes de alrededor de seis mil casas.
Lo anterior ha ocasionado que cerca de dos mil familias que tienen sus viviendas sobre la ribera del río, estén en riesgo de contraer enfermedades cutáneas y gastrointestinales, por lo que es necesario realizar cercos de salud para esta zona, comentó el regidor Víctor Manuel Hernández Félix.
Refirió que los posibles daños a la salud de los hidrómilos y las afectaciones a la fauna marina, se darán porque el municipio no cuenta con una planta de tratamiento de aguas residuales, por lo que mayoría de las salidas de los drenajes de Agua Dulce terminan en el río Agua Dulce y Tonalá.
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